El cobarde president Carles Puigdemont es el gran traidor en primer lugar a España y a los españoles, porque ha engañado al gobierno central durante años. Y esta cobardía ha provocado su deslealtad con los catalanes y con el resto de españoles. Puigdemont...
Traicionó a las instituciones catalanas, pues las puso en jaque y obligo al estado español a intervenir Cataluña paralizando su normal funcionamiento.
Traicionó en el día a día de todos los catalanes y de sus necesidades al mantener paralizadas estas instituciones, incluido el Parlament. El culpable de la actual paralización institucional no es Torra, que es un presidente títere, sino Puigdemont que desde Waterloo tiene a Cataluña como rehén.
Traicionó la buena voluntad y disposición de los negociadores que intentaron mediar para solucionar el llamado “conflicto catalán”. A estos negociadores los utilizó para ganar tiempo, porque no tenía el valor necesario para mantener sus compromisos.
Traicionó a los suyos cuando los abandonó, huyendo al extranjero como un cobarde.
Traicionó a los votantes catalanes al prometerles que volvería una vez efectuadas las elecciones del 21 de Diciembre y aún lo están esperando.
Traición es la palabra que define a Carles Puigdemont y a las pruebas nos remitimos.
Afirmó que se desvinculó del proyecto desde mediados de septiembre, cuando el Tribunal Constitucional suspendió las leyes de desconexión y "el referéndum muta a una gran movilización pública". En este sentido, reconoció que si pudiera volver atrás tal vez hubiera actuado de otra manera: "Si en la vida tuviéramos la oportunidad, a pelota pasada quizá revisaríamos esas decisiones". Por otra parte, aseguró que toda la campaña del 1-O se llevó a cabo con el "mecenazgo de gente comprometida con la causa, empresarios catalanes y catalanistas", aunque advirtió que estaba “especulando”: "Siempre he procurado no ser más ingenuo de lo imprescindible y Puigdemont me dijo que estuviera tranquilo y siempre me aseguró que no gastaría ni un euro público".
El lehendakari Íñigo Urkullu declaró en el juicio del 1-O que Carles Puigdemont le llamó para decirle que no podía cumplir el acuerdo de adelantar elecciones al que habían llegado ante la presión de la calle y de sus propios diputados. "A las 14.00 horas del 26 de octubre me comunicó lamentando que las personas que estaban en la plaza Sant Jaume manifestándose se le estaban rebelando, que entendía que también tenía una presión en su propio grupo parlamentario de Junts pel Sí y que no podía proceder al acuerdo que se había adoptado esa noche-madrugada de disolver el Parlament y convocar elecciones autonómicas, que era lo que yo le sugería para intentar evitar la aplicación del artículo 155".
'Yo no sé qué hago aquí, a mí me han engañado'. Carme se ha sentido traicionada por Junqueras. Me dijo: 'Yo me metí en esto porque Oriol (Junqueras) me dijo que no me iba a pasar nada y mira al final lo que me ha pasado'. A mí Junqueras me dijo que le apoyara en esto, que a mí no me iba a pasar nada [...] Queríamos presionar, sabíamos que no salía, pero era una forma de presionar'. Ella lo ha pasado muy mal por su nieto, que tenía siete meses. Me decía: '¿Pero tú crees que yo me voy a jugar por esta tontería el no ver a mi familia, y a mi nieto, que está recién nacido, el estar con mis hijos? Yo no sabía que esto me iba a pasar, que iba a entrar en la cárcel. Nunca lo supe'", relata la presa, que también traslada la animadversión que tiene Forcadell hacia el ex president fugado Carles Puigdemont. "De Puigdemont no la puedes hablar porque se pone enferma y además es que te mira y te dice que no quiere hablar de ese tío. Me decía: 'Por este cabrón estamos aquí'".
Desde el inicio de todo este proceso que ha fracturado la sociedad catalana, los políticos y entidades civiles como ANC y Òmnium Cultural han lanzado el mensaje que existe una persecución de España hacia Cataluña.
Bajo su punto de vista, se les persigue por ser catalanes. España no puede soportar ni Cataluña ni a los catalanes porque son una raza superior. Por eso se les tiene que perseguir y debilitarlos como raza.
También se persigue a los catalanes por sus ideas. Esta es otra de las premisas que España no puede soportar. El catalán piensa y, por eso, es perseguido. No ocurre lo mismo con los ciudadanos de otras comunidades, pues no molestan. A España le molesta Cataluña y el País Vasco.
Estas premisas han sido repetidas hasta la saciedad. En ningún momento se ha puesto encima de la mesa el hecho que aquellas personas se saltaron las leyes vigentes. Hay personas que siguen defendiendo lo que ocurrió los días 6 y 7 de septiembre. También lo ocurrido el 27 de octubre, cuando Puigdemont declaró la república catalana. Y es más, consideran que España es un país represor, porque la policía atacó a los manifestantes del 1 de octubre.
Es un derecho de todo ser humano el uso discrecional de cualquier lengua o idioma. Cuando pretendemos comunicarnos lo hacemos de forma en la que nuestro interlocutor o audiencia nos entienda usando para ello un esquema de lenguaje inteligible por ambas partes. Por ello, el desarrollo de las civilizaciones y los territorios ha ido de la mano de la “oficialidad” de una lengua y se ha velado por su correcta enseñanza y uso como elemento cohesionador de la cultura y promotor de las relaciones y el comercio. En aquellos lugares donde ha existido una mayor riqueza o variedad de idiomas hemos contemplado históricamente una pugna por la preponderancia de la lengua hasta mediados del pasado siglo, cuando se entiende definitivamente que las lenguas son esencia misma de la cultura y por lo tanto se protegen mediante el reconocimiento y la cooficialidad. Por ello es importante evitar que unas lenguas “arrasen” a otras de forma premeditada distinta al uso o la costumbre de los ciudadanos. El uso, y su libertad de uso, es el que debe preponderar en una sociedad democrática y libre. Por ello, el adecuado equilibrio entres las lenguas cooficiales debe ser una responsabilidad de las instituciones y sus gobernantes tal como dice el artículo segundo del Estatut de Catalunya:
“El català és la llengua oficial de Catalunya. També ho és el castellà, que és la llengua oficial de l’Estat espanyol. Totes les persones tenen el dret d’utilitzar les dues llengües oficials i els ciutadans de Catalunya tenen el dret i el deure de conèixer-les. Els poders públics de Catalunya han d’establir les mesures necessàries per a facilitar l’exercici d’aquests drets i el compliment d’aquest deure. D’acord amb el que disposa l’article 32, no hi pot haver discriminació per l’ús de qualsevol de les dues llengües.”
Por ello, la voluntad de mantener como única lengua vehicular al catalán y relegar el castellano nos lleva a realizar las siguientes reflexiones:
Si, en 35 países tiene el español como primera lengua extranjera en sus estudios como: Estados Unidos, Reino Unido, Noruega, Finlandia, Nueva Zelanda…
Si, en 57 países tiene el español como segunda lengua extranjera como: Francia, Grecia, Alemania, Suecia, Polonia…
Si, el español es el tercer idioma más estudiado a nivel mundial…
¿Todos esos países se estarán equivocando?
Si las personas bilingües poseen cerebros más activos y flexibles.
Si esta demostrado que el mayor índice de éxito académico esta vinculado al lenguaje materno.
Si está demostrado que los niños bilingües muestran mayor autocontrol.
¿Hay que impedir la educación en lengua materna siendo una lengua oficial?
Si los informes PISA revelan que el nivel de conocimiento de lengua castellana en Cataluña es similar a los de la media en España.
Si los alumnos catalanes dominan de forma similar ambas lenguas con tan solo unas pocas horas de castellano a la semana, demuestra claramente que debemos felicitar a los profesores de castellano de nuestro sistema educativo y que debemos felicitar a nuestros alumnos en detrimento de un antidemocrático sistema de inmersión que perpetua la dictadura lingüística.
Justificación:
El sistema de inmersión es un anomalía en Europa. No existe ningún país en el que se dé un modelo similar respecto a una lengua cooficial.
Debemos plantearnos la evidencia de que para el aprendizaje de una lengua y su conocimiento no es necesaria la inmersión lingüística.
Las Naciones Unidas consideran una violación de derechos no estudiar el idioma materno.
EXIGIR al Gobierno y al Parlamento de TODOS los españoles, que habiliten los mecanismos políticos, pero también de fuerza democrática para prevenir, evitar, y en su caso, neutralizar este nuevo intento de golpe de estado que se nos está anunciandoLos acontecimientos de los últimos días con cortes de carreteras, impedimento del ejercicio de libre derecho de manifestación, las amenazas de boicot a la realización de un consejo de ministros en Barcelona, las amenazas a los Mossos de Esquadra y las amenazas de paralización del normal desarrollo de las actividades de la ciudadanía han provocado ya el desborde de lo razonable y lo políticamente correcto con la creación del llamado Consell de la República y con los testimonios vertidos en ese acto por líderes que han mostrado la verdadera cara del independentismo e incitando al conflicto civil.
Es intolerable para cualquier sociedad que sus líderes lejos de velar por la convivencia de sus gobernados,marquen la vía de la violencia animando a actuar a los radicales, destruyendo todo aquello que crean necesario, y regulando la forma de vida de la ciudadanía mediante la amenaza.
Es intolerable que se pretenda castigar a las fuerzas del orden por hacer frente a la barbarie, a la quema, la coacción y el abuso, impidiendo que sean esos gansters los dueños de las calles, plazas o carreteras de nuestro territorio.
Es intolerable que se pretenda convertir a la policía de todos en una policía de algunos al servicio de una causa que se muestra cada vez más violenta y radical.
Es intolerable que se permita que encapuchados al puro estilo del KukusKlan reinen a sus anchas por las calles de nuestras ciudades y carreteras mientras los líderes policiales y políticos los observan sonrientes.
Es intolerable que un presidente se retire de ejercicios espirituales dejando a todo un territorio sumido en el asombro por las amenazas de esos gansters en nómina de las organizaciones a las que alientan.
Por todo ello, creemos que debemos dar el paso de exigir firmeza democrática tanto al Parlamento como al gobierno de todos los españoles, pero necesitamos saber tu opinión.